1° Campaña Solidaria 2021
Campaña Solidaria: “Con María Compartimos Nuestra Alegría”
El mes de mayo, tradicionalmente se ha convertido en el mes de María, y es por esto, que, siguiendo el ejemplo solidario de nuestra Madre, ponemos en marcha esta campaña solidaria en favor de los niños y familias que sobreviven en los altos de Huaycán.
Ya conocemos sus necesidades y su abandono, y por eso nos toca a nosotros continuar cumpliendo el compromiso que contrajimos con ellos el año pasado. Es muy doloroso ver la situación de los contagios ante esta pandemia, peor si a eso le sumamos el hambre, podremos imaginarnos el infierno que se vive en aquellos cerros.
Sor Rosa, hermana franciscana que lleva años cuidando de ellos, nos pide que colaboremos con alimentos no perecibles de primera necesidad,
pues realmente en Huaycán se pasa hambre.
Por eso, durante todo este mes de mayo, vamos a poner en marcha toda la solidaridad que atesoran nuestros corazones,
y lo vamos a hacer con alegría, porque como dice San Francisco: “dando es como se recibe”.
Que la Virgen María, que siempre ayudó a los que estaban a su lado,
nos abra nuestro espíritu solidario para convertir en sonrisas las penas de los niños de Huaycán.
El mes de mayo, tradicionalmente se ha convertido en el mes de María, y es por esto, que, siguiendo el ejemplo solidario de nuestra Madre, ponemos en marcha esta campaña solidaria en favor de los niños y familias que sobreviven en los altos de Huaycán.
Ya conocemos sus necesidades y su abandono, y por eso nos toca a nosotros continuar cumpliendo el compromiso que contrajimos con ellos el año pasado. Es muy doloroso ver la situación de los contagios ante esta pandemia, peor si a eso le sumamos el hambre, podremos imaginarnos el infierno que se vive en aquellos cerros.
Sor Rosa, hermana franciscana que lleva años cuidando de ellos, nos pide que colaboremos con alimentos no perecibles de primera necesidad,
pues realmente en Huaycán se pasa hambre.
Por eso, durante todo este mes de mayo, vamos a poner en marcha toda la solidaridad que atesoran nuestros corazones,
y lo vamos a hacer con alegría, porque como dice San Francisco: “dando es como se recibe”.
Que la Virgen María, que siempre ayudó a los que estaban a su lado,
nos abra nuestro espíritu solidario para convertir en sonrisas las penas de los niños de Huaycán.